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La octava casita infantil de Ciego de Ávila quedó inaugurada este viernes en la Empresa de Materiales de la Construcción (Avilmat), para beneficio de trabajadores de esa entidad, otros sectores priorizados y familias vulnerables de la comunidad aledaña.
Liván Izquierdo Alonso, miembro del Comité Central del Partido y primer secretario de la provincia, y Alfre Menéndez Pérez, gobernador de Ciego de Ávila, presidieron la apertura de ese plantel, efectuada en el contexto de las celebraciones por el aniversario 65 del triunfo de la Revolución.
Alba Edys Jiménez García, directora del centro educacional, denominado Amiguitos de Avilmat, explicó a la Agencia Cubana de Noticias que tiene la particularidad de ubicarse en un local construido específicamente para ese objetivo y posee capacidad para acoger 24 niños.
Argumentó que la mayoría serán hijos y nietos de trabajadores de Avilmat, pero también resolverán situaciones de profesionales de Salud Pública, Educación Superior y núcleos en desventaja económica y social del Consejo Popular Pedro Martínez Brito, sito en la ciudad cabecera y colindante con la empresa.
Al referirse al funcionamiento, precisó que conformarán un grupo múltiple, cuya atención estará a cargo de un personal especializado: una máster en Ciencias de la Educación y otra licenciada de la propia esfera, dos auxiliares pedagógicas, y la auxiliar general de servicios, está última responsable de la alimentación, higiene de los locales y la lavandería.
Los pequeños cumplirán una programación igual a la de los círculos infantiles al recibir conocimientos del mundo social y natural, la lengua materna y nociones elementales de Matemáticas, Educación Artística y otras materias, puntualizó Jiménez García.
Aseguró que están creadas las condiciones para asistir a la Primera Infancia, además de apreciar el impacto social de esa institución, que aportará al cumplimiento de los programas gubernamentales para el Adelanto de las Mujeres (PAM), la Atención a la Dinámica Demográfica y la Transformación en Barrios y Comunidades.
Dianelys Morgado Cabrera, jefa del Área de Negocios y Comunicación de Avilmat, valoró que se favorece la puntualidad, tanto a la entrada como la salida del centro laboral, acorde a los horarios establecidos, pues se reducen los traslados intermedios, al estar la institución educativa en la misma empresa.
Comentó que el círculo infantil de su niño le queda distante de la casa y en dirección opuesta a su trabajo, lo que requería gran esfuerzo para cumplir los deberes como madre y trabajadora con alto grado de responsabilidad.
Asimismo, destacó que los horarios de la casita infantil estarán ajustados a las necesidades de los trabajadores, por tanto, quedará resuelto el dilema de los días en que se extiende el tiempo laboral.
Luis Borges González, delegado de la Circunscripción Número 81 del municipio cabecera, agradeció la ayuda a una madre urgida de incorporarse a la vida laboral para proporcionar mejor calidad de vida a su pequeña de dos años y un adolescente de 16 que presenta una discapacidad intelectual.
Avilmat constituye referente de empresa estatal socialista, lo que contempla la atención y el mejoramiento de la calidad de vida de sus recursos humanos y las familias, además de mantener un compromiso con las transformaciones económicas, sociales y espirituales en las áreas donde están enclavadas la empresa y sus dependencias.
Durante el año que finaliza hubo un despunte en la creación de casitas infantiles en el territorio avileño, donde funcionan otras siete, distribuidas en los municipios de Morón (4), Baraguá (2) y Primero de Enero (1), en entidades pertenecientes a los sectores educacional, agropecuario y de la defensa.
En fase constructiva se encuentran otras dos, pertenecientes a la Delegación Territorial del Ministerio del Turismo y la Empresa de Construcciones y Montajes de Ciego de Ávila (Conavil).
Para los trabajadores de las entidades a las que corresponden, las casitas resultan una solución a la necesidad del cuidado de sus hijos, en un centro seguro, con asistencia educativa y a menor costo que los servicios particulares (casas cuidadoras y cuidadoras privadas).
Constituye otra ventaja que madres, padres o personas responsables de los infantes, puedan acceder a fuentes de trabajo e ingresos para el bienestar familiar.
